4 Mitos falsos del mundo del orden

El mundo del orden está de moda, eso es innegable.

Nos bombardean en revistas, redes sociales, series de Netflix con espacios perfectamente organizados, antes y después espectaculares, todo ordenado siguiendo los colores del arcoiris, con cientos de cajas, contenedores o cestas increíbles, y aunque es cierto que en muchos proyectos es posible, también no es más cierto que no siempre es ni imprescindible ni posible.

Cuando explico tips de orden, enseño antes y después, os muestro organizadores que os pueden ayudar en la organización de algún cajón, armario o cocina, pero siempre quiero asegurarme de no dar una impresión equivocada sobre la organización.

No os quiero hacer creer que para organizar cualquier espacio es necesario comprar un montón de organizadores, muy caros, que todo se hará en un abrir y cerrar de ojos, que si no consigo un espacio digno de Instagram, perfecto, ordenado con los colores del arcoiris y cambiando cientos de cosas el proyecto ha fracasado.

Por eso voy a aporvechar este post para desmitificar algunas leyendas que se han creado en el mundo del orden.

1- Necesito contenedores bonitos y caros para organizar mi espacio.

Reconozco que me encanta los contenedores, cestas u organizadores, podría ser adicta, y si el proyecto me lo permite los utilizo, pero definitivamente no siempre es necesario comprar todo tipo de contenedores costosos para organizar un espacio.

Cuando uno decide organizar un espacio o incluso cuando me contrata algún cliente para hacerlo, no se puede salir corriendo, antes de empezar a ordenar a comprar todas las piezas "ideales" que nos gustaría tener, porque muchas veces podemos encontrar la manera de crear un sistema de organziación que funcione con las cosas que tenemos disponibles en casa.

2- Comprar contenedores bonitos automáticamente me hace más organizado.

He avisado de que no hay que salir corriendo y comprar antes de organizar, pero al parecer no habéis leido mi post y lo habéis hecho, y llegáis a casa con un montón de cajas, cajitas, cestitas y no sé cuantas cosas más para organizar vuestros espacios. Una vez con todo en casa el siguiente paso que lleváis a cabo es poner todas las cosas que estaban esparcidas por todos lados en esos contenedores preciosos, sin mirar lo que ponéis en ellos, el resultado, os lo digo: UN ESPACIO QUE TIENE SOLO FACHADA DE ORGANIZADO.

Más alto no lo puedo decir. Lo único que se ha hecho es mover los cientos de objetos que inundan cualquier rincón a los contenedores, sin tomarse el tiempo de revisarlos y eliminar lo que no se usaba, estaba estropeado o no se amaba, básicamente lo que acaba de pasar es que se ha guardado el desorden en cajas bonitas.

3- Organizar cualquier espacio por un organizador profesional es rápido.

Esta desmitificación es fruto de mi experiencia profesional.

Cuando alguien me contacta para que le ayude a organizar un espacio, ya sea un armario, un baño, una cocina o un dormitorio, siempre les aviso que necesitaremos bastante tiempo, ni 1, ni 2 horas, se necesitan unas cuantas horas para organizar bien cualquier espacio. Muchos de ellos se sorprenden enormemente. De hecho incluso alguno de ellos me propone que lleve a cabo el proyecto de orden en 1 h ó 2 horas, en estos casos directamente digo que no, porque sé que es un proyecto inviable.

Quizás no ayude que una famosa serie de Netflix de orden, haga sus espectaculares proyetos de orden en unas pocas horas, pero os digo desde ya, que eso sólo pasa en la televisión, porque en la vida real es imposible, es necesario alguna que otra hora para conseguir un espacio organizado y funcional, incluso si es un organizador profesional el que lo hace.

4- Si no consigo un espacio perfecto es un fracaso.

La perfección está sobrevalorada y en el mundo del orden no puede ser menos.

Para mi un espacio perfecto es el que me ayuda, el que me hace la vida más fácil, no el más bonito.

Muchos proyectos de los que hago habitualmente cuando veo la foto del antes y el después hay cambios espectaculares, pero no hablo de cambios con un montón de cajitas monísimas, productos organizados siguiendo los colores del arcoiris o espacios cambiados por completo, hablo de cambios más profundos: tener sólo los objetos que se necesitan, nada de por si acaso en ningún cajón, todo accesible, ya sea dentro de una caja monísima o de una caja de cartón que queremos aprovechar, el rojo puede ir al lado del negro, no es necesario disponerlo todo como el arcoiris. En definitiva un espacio real y funcional, y eso si que es PERFECTO.

Estos son algunos de los mitos que me he ido encontrando en esta andadura que empezé dentro del mundo del orden, no son los únicos, pero si los que me parecen más relevantes.

Si quieres conocer más sobre el mundo del orden te animo a seguirme en mis redes sociales @esthertorras .

Nos vemos!!