¿Sientes que siempre hay áreas en tu casa que parecen estar siempre desordenadas, por más que intentes organizarlas?
Estos espacios son conocidos como puntos calientes del desorden y son mucho más comunes de lo que piensas. La encimera de la cocina, la entrada, el coche o tu escritorio suelen ser los protagonistas.
En este artículo descubrirás por qué aparecen estos focos de desorden, cuáles son los más comunes y cómo ponerles solución práctica para que tu casa se sienta más ordenada y funcional.
¿Por qué se forman los puntos calientes del desorden?
Los puntos conflictivos del desorden aparecen debido a las rutinas y actividades diarias de un hogar ajetreado. Queremos tener las cosas a mano para funcionar en el día a día, pero muchas veces terminamos dejándolas en lugares de paso o zonas concurridas.
Con un poco de atención y algunos sistemas simples de organización, estos puntos pueden dejar de ser un dolor de cabeza.
Beneficios de despejar los puntos conflictivos
Quizás pienses: “¿para qué ordenar si volverá a desordenarse?” Y es cierto que volverá a acumularse, pero la diferencia está en el mantenimiento constante.
Los beneficios son muchos:
- Menos estrés y agobio mental (el orden exterior trae calma interior).
- Más claridad para pensar y tomar decisiones.
- Menos polvo, ácaros y hasta moho acumulado.
- Un hogar más acogedor, limpio y saludable.
Los 12 puntos calientes de desorden más comunes (y cómo solucionarlos)
1. La entrada
Es el primer lugar donde caen las cosas al llegar a casa: chaquetas, zapatos, mochilas, correo…
Solución:
- Instala ganchos para abrigos y mochilas.
- Usa un zapatero y un paragüero.
- Coloca una bandeja para llaves y correo.
- Establece el hábito de no dejar todo en el suelo al llegar.
2. El lavadero
Ropa limpia, ropa sucia, detergentes y objetos varios hacen que se convierta en un caos.
Solución:
- Usa cestas de malla para suministros.
- Ten un cesto exclusivo para ropa.
- Devuelve la ropa limpia a su lugar de inmediato.
- Guarda solo artículos de lavandería en este espacio.
3. Tu escritorio
El lugar de trabajo se llena de papeles, notas, cupones y útiles escolares.
Solución:
- Usa bandejas y carpetas para papeles.
- Organiza cajones con separadores.
- Añade una estantería o carrito auxiliar si te falta espacio.
4. La despensa
El área más transitada de la cocina y, por ende, la más propensa al desorden.
Solución:
- Vacía todo, limpia y tira lo vencido.
- Dona lo que no uses.
- Crea zonas (enlatados, especias, repostería…).
- Usa contenedores transparentes.
5. El refrigerador
Igual que la despensa, necesita limpieza constante.
Solución:
- Revisa caducados semanalmente.
- Agrupa por categorías: lácteos, carnes, verduras, condimentos.
- Usa contenedores para artículos pequeños.
6. La encimera de la cocina
Se convierte en depósito de todo: mochilas, correo, ropa, platos, etc.
Solución:
- Retira lo que no pertenezca a la cocina.
- Crea un lugar para cada cosa.
- Evita usarla como “zona de caída”.
7. La sala de juegos
Los juguetes parecen multiplicarse y ocupar toda la casa.
Solución:
- Reduce la cantidad de juguetes.
- Dona lo que ya no se usa.
- Organiza con estantes y cestas.
- Fomenta el hábito de recoger después de jugar.
8. El cajón de trastos
Ese famoso cajón que acumula de todo.
Solución:
- Vacíalo y tira lo que no sirva.
- Usa bandejas pequeñas o separadores.
- Revísalo cada cierto tiempo para mantenerlo bajo control.
9. La mesa de centro
Es la superficie donde se acumula ropa, platos, mandos, libros y juegos.
Solución:
- Retira lo que no pertenezca.
- Usa bandejas y cestas para organizar.
- Considera mesas con almacenamiento oculto.
10. El armario
Ya sea de ropa, de abrigos o de ropa blanca, tienden a saturarse.
Solución:
- Ordena por secciones pequeñas.
- Dona o recicla lo que no uses.
- Usa perchas finas y cajas organizadoras.
- Mantén cada armario con su función específica.
11. Tu bolso
Recibos, maquillaje, snacks, notas… un imán de desorden.
Solución:
- Vacíalo y tira lo innecesario semanalmente.
- Usa bolsitas pequeñas para agrupar categorías.
- Sustituye productos vacíos o dañados.
12. Tu coche
Entre trabajo, niños y actividades, suele ser otro punto crítico.
Solución:
- Limpia semanalmente (o a diario si puedes).
- Ten una cesta para objetos sueltos.
- Usa organizadores para básicos y emergencias.
Conclusión: el secreto está en el mantenimiento
Los puntos calientes del desorden son inevitables en cualquier hogar, pero sí puedes controlarlos. La clave está en establecer sistemas sencillos y mantenerlos con pequeños hábitos diarios o semanales.
🌟 Empieza por un solo punto de desorden hoy mismo y notarás cómo tu casa se siente más ligera y ordenada.


